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(Vía Univisión)
Manifestantes alrededor del mundo pidieron a Irán poner fin a la represión de activistas opositores y exigieron la liberación de cientos de personas arrestadas durante las protestas luego de las disputadas elecciones presidenciales.

Grupos como Human Rights Watch y Amnistía Internacional apoyan el día internacional de acción, con protestas organizadas en más de 80 ciudades.

Los manifestantes reclaman a las autoridades iraníes que liberen a los que ellos consideran cientos, incluso miles, de personas detenidas durante las protestas que siguieron a las elecciones presidenciales del mes pasado que mantienen a Mahmud Ahmadineyad en el poder.

Unas 600 personas realizaron una protesta "ruidosa pero pacífica" frente a la embajada iraní en Londres, una de varias manifestaciones en Europa.

En Bruselas, manifestantes sostuvieron pancartas con imágenes de los detenidos o fallecidos, incluyendo a Neda Agha Soltan. La muerte de esta mujer de 27 años, que recorrió el mundo a través de internet, se convirtió en un símbolo que alentó las protestas.

En Amsterdam, la premio Nobel iraní Shirin Ebadi le pidió a la comunidad internacional que rechace el resultado de las elecciones en Irán y convoque a una nueva votación monitoreada por las Naciones Unidas.

Al dirigirse a varios cientos de personas, Ebadi dijo que no se debería permitir que Irán se convierta en otro Zimbabue, en una aparente referencia a la violencia que se produjo en ese país en torno a las elecciones presidenciales.

En Brasil, cerca de 20 personas se reunieron en una pequeña plaza de Sao Paulo, para participar en una protesta de media hora. Fariba Vahdat, miembro de la comunidad Baha'i en Brasil, dijo manifestar por "la crueldad que se encuentra en las calles de Irán".

Cientos de manifestantes se concentraron detrás de barricadas policiales cerca del distrito comercial y turístico Times Square en Nueva York. El grupo coreó "Detengan la matanza. Detengan la tortura".

Un pequeño grupo de iraníes en Nueva York ha sostenido una huelga de hambre en los últimos tres días y también ha realizado protestas a las afueras de las Naciones Unidas exigiendo a la organización investigar las violaciones de derechos humanos en Irán.

También en la ONU, pero en su sede de Ginebra, cerca de 80 personas, con muñequeras y pañuelos verdes _el color del movimiento opositor_ protestaron.

Entretanto, en Viena, alrededor de 350 personas se reunieron mientras 150 protestaban en Roma.

En Noriega, cerca de 250 inmigrantes iraníes se encontraron en un centro de conferencia cercano a Oslo. Unas 3.000 personas se reunieron en Estocolmo mientras que otras manifestaron su apoyo en Dinamarca.

En Islamabad, la capital paquistaní, unos 20 iraníes _entre ellos refugiados y estudiantes_ se congregaron a las afueras de un club de prensa local para protestar la represión en Irán, gritando "Muera el dictador!".

"Están matando a iraníes inocentes", dijo Hessam Moghimi de 27 años, quien ha vivido en Pakistán alrededor de ocho años. "Queremos que se haga justicia por la sangre derramada".

En Australia, hubo pequeñas manifestaciones en Sydney, Melbourne, Brisbane, Adelaida y la capital, Canberra.

Cerca de 50 personas desplegadas en el parlamento de Victoria en Melbourne ondearon banderas y pancartas en las que se leía "Paren la tortura" y "Las elecciones en Irán fueron un fraude"

Alrededor de 80 personas se congregaron en Tokio, con bufandas verdes alrededor de sus cuellos y velas encendidas.

Los manifestantes observaron vídeos de Irán tomados recientemente y fotos en una pantalla montada en el parque Miyashita en el centro de Tokio. Con un fondo musical de rock, aplaudieron los discursos y pidieron por "un Irán libre" y elecciones limpias.

En Seúl, Corea del Sur, donde cerca de 30 personas protestaron, Park Jin'ok de Amnistía dijo que el grupo estaba llamando a la "liberación inmediata y sin condiciones" de los detenidos.

Los manifestantes también quieren que las Naciones Unidas investigue las acusaciones de abuso a los derechos humanos y dijeron que Teherán debe permitir la libertad de expresión y de reunión.

Mientras tanto en Irán, la policía y las milicias pro gubernamentales atacaron a cientos de manifestantes que se habían reunido en Teherán en respuesta a las protestas globales de solidaridad, dijeron testigos que pidieron permanecer anónimos por miedo a represalias. Los activistas cantaban "muerte al dictador" y "devuelvan nuestros votos".

Cientos de miles de iraníes protestaron el resultado de las elecciones presidenciales, calificándoles como fraudulentas, hasta que las fuerzas de seguridad los reprimieron, arrestando a cientos de personas y matando al menos a 20.