¿Qué pensamos los bahá'ís sobre las guerras en el mundo?
Deseo compartir algunos aspectos sobre el pensamiento que tenemos los bahá'ís sobre las guerras que afligen a la humanidad:
Las guerras son elementos de un orden mundial que ha caducado, resabios de la infancia colectiva de la humanidad que debe dar paso a su madurez. En todos los libros religiosos hay promesas de una era de paz: 'Convertirán en arados sus espadas y no se ensayarán más para la guerra'... Bahá'u'lláh dijo: 'Estas luchas estériles, estas guerras desastrosas pasarán y la Más Grande Paz reinaŕa'.
¿Cuándo tomarán lugar estas profecías?, dependerá de la voluntad que tengan las gentes del mundo; ¿Si lo harán antes de sufrir aún más las consecuencias de sus acciones --y omisión-- o por medio de una acción concertada? Antes o después, las promesas se cumplirán. Irrevocablemente.
Es natural que nuestros corazones se sientan abrumados por las noticias de guerras en el mundo: hombres, mujeres, niñas y niños asesinados, heridos, con miedo y afliccción; escenas de muerte y destrucción; declaraciones violentas por parte de ambos adversarios... Naturalmente que sufrimos a causa de esto porque amamos a la humanidad.
La solución a esta crisis sólo puede ser espiritual. No debemos permitir que esta aflicción, y la que padecen millones de seres humanos por hambre, catástrofes, enfermedades y otros padecimientos, nos quiten las energías que necesitamos consolidar para la parte que nos corresponde en la construcción del Reino de Dios sobre la Tierra.
Tenemos tres opciones, como todo ser humano, las cuales son: unirnos al proceso de desintegración, unirnos al proceso de construcción o ser observadores indiferentes de ambos procesos.
Puesto que somos bahá'ís, y con la aceptación de la Fe Baháí adquirimos el compromiso de promover los mejores intereses para la raza humana, sólo nos queda una opción: y es unirnos a los procesos de construcción del orden de Bahá'u'lláh.
Hay una diversidad de campos de acción y estratégicamente nos enfocamos en cuatro: asistiendo y/o abriendo reuniones devocionales, en las clases de niños y niñas (enseñando y aprendiendo: todos enseñamos y todos aprendemos cuando participamos); grupos prejuveniles (como animadores y participantes, también) y participando activamente en el proceso de los círculos de estudio.
Estaban unos amigos platicando sobre la construcción del Reino de Dios sobre la Tierra y decía uno: "Yo creo que todos nos iremos a una nueva tierra y ahí será el paraíso". Dice otro: "Yo creo que en un abrir y cerrar de ojos, descenderá la nueva Jerusalén, que será una ciudad preciosa donde viviremos eternamente". Y dice el bahá'í: "Yo creo que caerán del cielo toneladas de arena, hierro, cemento, ladrillos, ventanas de vidrio, azulejos y un cartelito que diga 'Hágalo usted mismo'."
Dios cumplirá Su Promesa, pero en Su infinito amor nos da la oportunidad de ser parte de Sus Planes, de hacer nuestra labor para la construcción de Su Reino.
Jesucristo dijo
Lc 3:31 El reino de los cielos es semejante al grano de mostaza, que un hombre tomó y sembró en su campo;
13:32 el cual a la verdad es la más pequeña de todas las semillas; pero cuando ha crecido, es la mayor de las hortalizas, y se hace árbol, de tal manera que vienen las aves del cielo y hacen nidos en sus ramas.13:33 El reino de los cielos es semejante a la levadura que tomó una mujer, y escondió en tres medidas de harina, hasta que todo fue leudado.
Por tanto el tamaño de nuestra comunidad, no debe desalentarnos; aunque sintamos que nuestros esfuerzos son pocos, pertenecemos a la 'minoría creativa' que al comienzo de la edificación de una civilización se levanta a hacerla realidad.
Comentarios
Si deseamos tanto la Paz, debemos darle paso, debemos empezar nosotros mismos a hacerle cabida, a vivir en paz y armonía.
También darle paso a la Unidad, a la verdadera unidad.
Y su un pensamiento de Guerra nos invade, tenemos que oponerle uno mucho más grande a Favor de la Paz.
Son los sabios consejos de nuestros Amados Maestros, Bahá'u'lláh y 'Abdu'l-Bahá... quienes nos han enseñado que la vida, no es sino un puñado de polvo, y que nuestro verdadero destino es la Reunión con nuestro Amado...
Que el mundo lo consulte con su conciencia, y que encuentre que la Paz y Seguridad del mundo, son Inalcanzables a menos que la Unidad Esté firmemente establecida.